ImaginaVital: actuar
Solicitamos su permiso para obtener datos estadísticos de su navegación en esta web, en cumplimiento del Real Decreto-ley 13/2012. Si continúa navegando consideramos que acepta el uso de cookies. OK Más información
Mostrando entradas con la etiqueta actuar. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta actuar. Mostrar todas las entradas

martes, 5 de junio de 2018

Encuentra tu límite, pero no te limites

No te exijas más de lo que puedes dar en cada momento. Esforzarse no es "forzar". Una cosa es salir de la zona de confort y comenzar a moverte y evolucionar, otra muy distinta es "la presión", de hacer algo que te lleva más allá de lo que estás preparado. Sí, está bien evolucionar, está bien el cambio, la actitud positiva ante lo que puedes y lo que no puedes hacer. 
Todos conocemos nuestros límites. Hay personas que creen conocernos mejor que nosotros mismos, pero, quién va a conocerte mejor que tú desde tu interior, ese que nos habla a diario y nos produce los miedos y las alegrías. No se trata de saltar al vacío, se trata de colocar antes la red, para saber a dónde tienes que volver, o como hacerlo de nuevo sobre seguro. Y si piensas: "no hay nada seguro", eso está claro, pero pisando tierra firme. A menos que seas una de esas personas que preparan la maleta, sin dinero y sin dirección. Puede salir bien, claro que sí, pero si has hecho antes un mapa mental con los pasos a seguir, llevas clara la idea hacia lo que quieres hacer, sin perderlo nunca de vista, te centras en ello, pese a las trabas, haces el ensayo y error, entonces llegará un día que te encontraras de frente con tu meta, y actuarás sobre seguro.
Una cosa es "dar" algo más y otra forzar la máquina.
Cuando forzamos hay algo que no funciona en nosotros, algo nos dice que no es el momento o no es el camino. Se nota. La pista es la tranquilidad interior. Quizá este año te sientes mal dando el paso y cada vez que te acercas, ves el mundo en contra, y parece que una losa te aplasta. En cambio, si refuerzas tu interior y conoces los caminos y las posibilidades, la próxima vez que lo intentes descubrirás que era mucho más fácil de lo que parecía en un principio. Que nadie te apunta, que cada uno va a lo suyo, y lo tuyo es sólo tuyo. 



Yolanda Del ©

martes, 27 de marzo de 2018

Rompe el muro

Si lo único que ves delante es un muro, quizá sea hora de mirar hacia los lados. Abre tu abanico de posibilidades. Mira los colores intermedios. Ten en cuenta otras opiniones. Escucha activamente. Da oportunidades.


Yolanda Del ©

jueves, 6 de julio de 2017

Actúa. Dale vida a tus ideas.

Actuar desde dentro, sin ponernos obstáculos. Actuar desde la paz interior y ser esa paz,  se transmite a otros con sólo tu presencia. Si lo haces así, todo lo exterior que necesitas para poner en marcha tus metas, simplemente va apareciendo. Va saliendo del interior al exterior, y tú pensarás, "que casualidad", pero no. Es "causalidad", es haber forjado el diseño de la imagen  y así has convertido el sentimiento en algo palpable.
Ante el desorden de la vida exterior, orden interior, esa es la respuesta a todo. Hay que "pensar" antes de actuar. Tenemos que aceptar nuestra fragilidad, para que aparezca la fuerza y la acción. Tenemos que querernos y apreciarnos a nosotros mismos, lo que representamos. Y así lo que somos en el interno, nuestro "yo real", sale hacia lo externo. 
+Aparecen las nuevas herramientas de trabajo que antes no tenías.
+Cambian tus hábitos, ya que acoplas nuevos cometidos diarios.
+El cambio va siendo más fuerte que la resistencia.
+Las decisiones son coherentes y se pueden llevar a cabo con pequeñas metas.
+Todo fluye de forma natural.
¿Qué pequeños hábitos diarios puedes implementar en tu vida para actuar sin forzar?    

Yolanda Del ©

lunes, 29 de noviembre de 2010

***¡No aceleres el Tiempo, que es tuyo. No creas que el tiempo tiene más poder que tú! ⌛⏰


Te has dado cuenta de la importancia que se le da en multitud de libros espirituales al tiempo. Inciden en que el tiempo no importa, que sólo está en nuestra imaginación, que no existe ni el pasado ni el futuro, sino sólo el presente. Es ahora cuando estamos vivos, en este momento que respiramos, en el lugar en el que estamos.


Te has preguntado alguna vez por qué cuando somos pequeños el tiempo parece no pasar, los días son largos, tarda un siglo en llegar el verano, o el invierno, o las vacaciones. Pues la solución la tienes en tu mente; estamos constantemente concentrados en el mañana, en lo que vendrá, cuando haga aquello, cuando surja lo otro, cuando lo consiga... entonces llegará la Felicidad. Es nuestra constante ansiedad por atraer un futuro que no existe, cuando aceleramos nuestro tiempo

Imagínate que estas tirando de una cuerda gruesa y que atraes hacia ti lo que está en el otro extremo, e imagina que en el otro extremo está tu futuro, ¿no sería mejor soltar la cuerda y qué llegue cuando tenga que llegar? y no porque lo atraemos desesperadamente.  Prueba a soltar la cuerda, céntrate en hoy y mejor en ahora

Yo estoy aquí escribiendo este post para que tú lo leas, y este es mi momento y toda mi vida, en este segundo, una letra es toda mi vida. El tiempo pasa más deprisa, porque nos centramos tanto en el futuro, entonces los días corren cada vez más y más. Nos hacemos mayores y parece que todo va más rápido, pero no es cierto, el tiempo sigue yendo al mismo ritmo que cuando éramos niños. Es ese pensar tanto en el mañana, en vez de centrarnos en el ahora, lo que lo acelera.

Esto no quiere decir que el Futuro no llegue si no que llegará cuando le toque, a su paso, y entonces el futuro, será presente. No debemos dejar que un pasado que ya no existe, nos amargue la existencia, ni que un futuro incierto nos cree ansiedad. Si ponemos todo nuestro esfuerzo en el ahora, los problemas se reducirán a la nada, porque no existirán.
¡No aceleres tu tiempo! no tengas prisa, no desesperes, alégrate y agradece el día de hoy, siente...siente...siente la vida como pasa... siente el momento.

©Yolanda Del